Городская легенда о лягушке на фасаде Университета Саламанки. 

Vocabulario

No obstante - однако

fachada - фасад

Encargar - поручать 

minucioso - скрупулёзный  

sillar - тесаный камень

indescriptible - неописуемый 

calavera - череп

esculpido - вылепить

tiene en vilo - держать подвешенным

elucubrar - измышлять

labrar - обрабатывать, выделывать 

lujuria - похотливость

inmundo - грязный, отвратительный

castidad - непорочность

arrojar - бросать

difundía - распространять, разглашать

Así pues - стало быть

Texto

Fundada en 1218 por Alfonso IX, la Universidad de Salamanca es hoy la más antigua de España. No obstante, la famosa fachada que hoy podemos ver en el Patio de Escuelas su construcción no se inició hasta 1529. Encargada por los Reyes Católicos en su época de esplendor y finalizada por su nieto, Carlos I. Una obra maestra del arte plateresco español que se desarrolló durante los primeros 30 años del siglo XVI. Su minuciosa decoración, la continuidad de las estructuras góticas, sus escudos, sillares y frontones hipnotizan a todos aquellos turistas que tienen la oportunidad de contemplar la belleza de la fachada.

Pero además, tallada en piedra dorada de las canteras de Villamayor, este edificio adquiere unas cualidades indescriptibles debido a la variedad y la belleza de su decoración y a la abundancia e interés de los simbolismos que presenta como es el caso de la rana sobre la calavera.

En España hay otras ranas esculpidas en edificios de gran importancia, pero ninguna tan famosa como la que se encuentra en la fachada de la Universidad de Salamanca desde hace más casi 500 años. Un detalle ornamental que con el tiempo ha acabado convirtiéndose en la estrella de la fachada de este edificio histórico y en el verdadero icono de la ciudad.

Si la contemplación de la fachada ya atrae a numerosos turistas que visitan Salamanca, este fenómeno se ve ampliado por la insistente búsqueda de la rana entre los numerosos detalles de la fachada que cada día tiene en vilo a cientos y cientos de curiosos que se dejan la vista para encontrarla. Su presencia entre la casi olvidada y excepcional decoración plateresca, se ha convertido en parada obligatoria para los visitantes y a más de uno el suele pasar lo que ya comentaba Unamuno a sus alumnos: «Lo malo no es que vean la rana, sino que no vean más que la rana».

Cada día, cientos de turistas la buscan, lo cual puede resultar bastante difícil si no se cuenta con ayuda. Pero no te preocupes, si no la encuentras, basta con que te quedes un rato en el sitio. No tardará mucho en pasar alguien señalando el lugar donde está.

 

¿Por qué hay una rana en la fachada de la Universidad de Salamanca?

Cuenta la leyenda que el estudiante que fuera a estudiar a la ciudad y encontrara la rana en la fachada, tendría suerte, aprobaría sus exámenes y se casaría. Si ya estaba casado, podía pedir un deseo y éste se cumpliría.

Alrededor de la rana de la Universidad de Salamanca se han elucubrado múltiples teorías sobre el hecho que llevó a su escultor a ponerla ahí y su simbología. La versión menos creíble apoya que se trata de la firma del autor que labró las calaveras, ya que en aquella época los canteros solían dejar sus nombres en los bloques de piedra en forma de símbolos y figuras.

Otra explicación es el mensaje didáctico que podría encerrar. A lo largo de la historia, la rana siempre ha sido símbolo del pecado de la lujuria, la tentación sexual, los espíritus inmundos… En una época en la que era necesario evitar el peligro de las enfermedades venéreas, la iglesia y los gobernantes intentaban dar lecciones de moralidad al pueblo a través de las obras de arte. De esta forma, al estar la rana de la Universidad situada sobre un cráneo, el objetivo sería recordar a las gentes de la ciudad la importancia de la castidad para evitar el pecado y el contagio, ya que de lo contrario, se podría llegar a la muerte.

No obstante, recientemente parece haberse llegado a la verdadera explicación. El catedrático de Filología Latina, Benjamín García-Hernández cursó sus estudios en esta Universidad y, después de varios años de trabajo y una constante revisión de lo ya escrito, ha logrado arrojar un poco de luz sobre el tema en su obra «El desafío de la Rana de Salamanca: cuando la rana críe pelos». Una obra escrita desde el punto de vista de la propia rana con un toque muy fresco que no da lugar al aburrimiento. 

El autor sostiene que el conjunto de la rana y la calavera sobre la que se posa tenía como objetivo enviar un mensaje iconográfico para burlar de esta manera a la Inquisición. La calavera representaría al príncipe Juan, hijo de los Reyes Católicos que falleció antes de cumplir los 20 años y la rana sería la forma de transmitir el sutil mensaje de que la resurrección de los muertos que difundía la Iglesia no es posible. De esta forma, el escultor habría querido decir que esta supuesta creencia solamente llegaría «cuando las ranas críen pelo», es decir, nunca. La idea podría haberse dejado más clara si se hubiera acompañado de un lema que jamás llegó a ser tallado por no ofender la moral de la época y no poner en peligro la vida de su autor.

Así pues, entre el ir y venir de los dedos apuntando a la fachada y miradas curiosas, la rana se ha labrado un buen número de leyendas en torno a ella. Pero ya fuera la firma escultórica del autor, la manera de advertir sobre el pecado de la lujuria, símbolo de suerte o una burla de los artistas a la Inquisición, lo cierto es que la rana de la Universidad de Salamanca se ha convertido ya en todo un símbolo de la ciudad. Uno de esos detalles ornamentales secundarios que han superado por ellos mismos la grandeza del marco en el que se encuentran y que ha llegado a totalizar el significado de la fachada. Por eso, si vienes a pasar unos días a Salamanca, no puedes dejar pasar la oportunidad de visitar el Patio de Escuelas e intentar encontrar la famosa rana.

Preguntas (Вопросы)

1. ¿Dónde está la rana?

2. ¿Qué simboliza? 

3. ¿Conoces símbolos de este tipo en tu ciudad?

4. ¿Quisieras ir allí a verla?